Hugo Santiago REPORTAJE ESPECIAL
(Sintesis del reportaje publicado en la versión impresa edición 45)
La Neta/Tula de Allende.-Los vestigios de lo que fuera la ciudad más importante de la Cultura Tolteca (Tollan – Xicocotitlán) y capital de ese imperio, padecen los golpes que da el olvido gubernamental y presupuestario, y que origina que este importante punto del pasado se deteriore.
Al observar esta ciudad prehispánica, se podría decir que la Zona Arqueológica de Tula (ZAT), prácticamente se encuentra en el abandono, la maleza crece en los edificios que alguna vez fueron recintos ceremoniales o civiles.
El museo de sitio, las instalaciones contiguas, los caminos y puertas de acceso, señalamientos y equipamiento de basura, se encuentran en condiciones deplorables, hay goteras, techos y aplanados cayéndose, madera apolillada y materiales arqueológicos amontonados.
El centro arqueológico de Tula Hidalgo fue inaugurada por, el ex presidente de la república, José López Portillo el 16 de noviembre de 1982, y tiene un aspecto de abandono tanto en el Museo de Sitio Jorge R. Acosta y en la instalaciones contiguas.
En estos recintos se encuentran muchas bolsas de cerámica y otros objetos descubiertos en la zona arqueológica, tirados y amontonados.
Dentro de al zona arqueológica de Tula, los caminos de acceso se encuentran en pésimo estado, esto a pasar de que a principios de 2009 el presidente Felipe Calderón, echó a andar en las ruinas del centro ceremonial tolteca, su programa federal de empelo temporal.
En los edificios prehispánicos, la maleza se ha adueñado de los muros y paredes del pasado, la hierba ha crecido y hasta animales silvestres se albergan en estas construcciones, son el hogar de ratas, víboras y lagartijas.
El Coatepantli, donde un friso de cantera muestra a una serpiente devorando a un hombre semi descarnado, se esta borrando y haciendo un comparativo con fotografías antiguas de esta expresión de arte tolteca y con la vista actual, se denota ampliamente que las serpientes con todo y sus esqueletos, están desapareciendo por la acción del agua.
Igual situación padecen los frisos de águilas y zopilotes devorando corazones, y la representación del hombre – pájaro - serpiente, mismas que se ubican adheridas a los primeros cuerpos de al pirámide de los atlantes, o edifico B.
El extremo de abandono en que se encuentra la zona arqueológica, quedó ampliamente evidenciado cuando la madrugada del 21 de marzo del año 2003, un grupo de desconocidos grafitearon los atlantes con pintura roja, además de e los pilares, la alfarda y el muro de la capilla abierta del siglo XVI que se localiza dentro de la ZAT.
Al observar esta ciudad prehispánica, se podría decir que la Zona Arqueológica de Tula (ZAT), prácticamente se encuentra en el abandono, la maleza crece en los edificios que alguna vez fueron recintos ceremoniales o civiles.
El museo de sitio, las instalaciones contiguas, los caminos y puertas de acceso, señalamientos y equipamiento de basura, se encuentran en condiciones deplorables, hay goteras, techos y aplanados cayéndose, madera apolillada y materiales arqueológicos amontonados.
El centro arqueológico de Tula Hidalgo fue inaugurada por, el ex presidente de la república, José López Portillo el 16 de noviembre de 1982, y tiene un aspecto de abandono tanto en el Museo de Sitio Jorge R. Acosta y en la instalaciones contiguas.
En estos recintos se encuentran muchas bolsas de cerámica y otros objetos descubiertos en la zona arqueológica, tirados y amontonados.
Dentro de al zona arqueológica de Tula, los caminos de acceso se encuentran en pésimo estado, esto a pasar de que a principios de 2009 el presidente Felipe Calderón, echó a andar en las ruinas del centro ceremonial tolteca, su programa federal de empelo temporal.
En los edificios prehispánicos, la maleza se ha adueñado de los muros y paredes del pasado, la hierba ha crecido y hasta animales silvestres se albergan en estas construcciones, son el hogar de ratas, víboras y lagartijas.
El Coatepantli, donde un friso de cantera muestra a una serpiente devorando a un hombre semi descarnado, se esta borrando y haciendo un comparativo con fotografías antiguas de esta expresión de arte tolteca y con la vista actual, se denota ampliamente que las serpientes con todo y sus esqueletos, están desapareciendo por la acción del agua.
Igual situación padecen los frisos de águilas y zopilotes devorando corazones, y la representación del hombre – pájaro - serpiente, mismas que se ubican adheridas a los primeros cuerpos de al pirámide de los atlantes, o edifico B.
El extremo de abandono en que se encuentra la zona arqueológica, quedó ampliamente evidenciado cuando la madrugada del 21 de marzo del año 2003, un grupo de desconocidos grafitearon los atlantes con pintura roja, además de e los pilares, la alfarda y el muro de la capilla abierta del siglo XVI que se localiza dentro de la ZAT.
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